Guerra PopularIndia

El movimiento naxalita no ha matado a tanta gente como los partidos burgueses

Entrevista con Varavara Rao

El simpatizante naxalita y renombrado poeta Varavara Rao, quien estuvo en la ciudad la semana pasada para dar una conferencia, habla sobre los éxitos y fracasos del movimiento que cumple 50 años.

Medio siglo después, ¿han sido cumplidos los sueños con los que se inició el movimiento naxalita?

Cumplidos no, pero ha habido un gran avance después del contratiempo inicial. Naxalbari era el nombre de un pueblo, pero llegó a representar la aldea de todos. La palabra se convirtió en parte de nuestro idioma. La autoridad proclamada por las tribus de Naxalbari y Khari Bari se extendió como un incendio forestal. Reclamaron su derecho a su tierra. Esa reclamación se ha convertido en parte del pensamiento político alternativo.

El movimiento comenzó como rechazo a la política parlamentaria, y a cambio, propuso una política centrada en el pueblo. Hoy, este movimiento ha formado áreas de base en las regiones forestales en la zona oriental y central del país. Tras tomar la tierra de los terratenientes y protegiéndola de sus matones y de la policía, han formado cooperativas. En Bastar, durante los últimos 13 años, esta política alternativa está siendo practicada en forma de Janatana Sarkars, un frente unido de Adivasis, Dalits y pequeños agricultores. Es un gobierno único que funciona sin ayuda del Banco Mundial. Ha sido capaz de detener la expansión de las multinacionales y grandes empresas comerciales en los bosques. No hay otro ejemplo en la historia del mundo de una lucha armada de clases tan prolongada.

Pero el movimiento se mantiene reducido a los bosques…

Eso se debe a que los intereses del capital se encuentran hoy en el cinturón forestal donde el trabajo es barato. Sólo el bosque de Bastar tiene 28 tipos de minerales. A medida que el capital entra y se concentra en estas zonas, tiene que enfrentarse a la resistencia que luego desencadena la represión. Por ello, la lucha se ha desplazado allí.

¿El pueblo puede escojer? ¿Qué pasa con el tiroteo indiscriminado de presuntos delatores, la coacción?

Si estuvieran forzando y disparando indiscriminadamente a las personas, no habrían podido mantener el movimiento durante tanto tiempo. Los maoístas se mueven entre los Adivasis. Les llevó mucho tiempo convencer a los Adivasis para que renunciaran a algunas de sus prácticas. Si hubo coacción, ¿por qué habría tomado tanto tiempo?

Cuando el movimiento comenzaba, el dicho era; «los Dalits y los Adivasis son como el polvo bajo tus pies». Los naxalitas cambiaron ese dicho a: «El polvo bajo tus pies ahora te ataca en el ojo». ¿Podría eso ser resultado de coacción?

¿Qué pasa con las acusaciones de que las mujeres se utilizan como esclavas sexuales?

Todo propaganda policial. En Bastar, más del 50% de los maoístas son mujeres. Hay más de cienmil mujeres en la Mahila Sangh (Asociación de Mujeres) de Dandakaranya. Ellas son parte de la milicia y de las alas culturales. ¿Estarían allí en tal cantidad si fueran tratadas como esclavas? En Andhra, muy temprano, una de las mayores conquistas fue el fin de la práctica de que el terrateniente fuese el primero en tener derecho sobre una niña tan pronto como alcanzaba la pubertad y en su noche de bodas.

¿Pero a qué precio ha llegado esto? También hay movimientos populares no violentos, como el Narmada Bachao Andolan.

¿Pero qué han logrado? La presa se construyó y fue recientemente dedicada a la «nación» por el Primer Ministro. Cincuenta años del movimiento naxalita no han matado a tanta gente como los partidos burgueses. La acción policial bajo Nehru en Telengana y Hyderabad contra los comunistas y razakars; La Operación Estrella Azul de Indira Gandhi y sus consecuencias; la masacre Sikh de 1984 bajo Rajiv Gandhi y luego los disturbios que siguieron a la demolición de la mezquita Babri Masjid bajo Narasimha Rao; Guyarat en el 2002 bajo Narendra Modi; y el valle de Cachemira todos estos años… Luego están los desastres provocados por el hombre, como el Desastre del Gas de Bhopal, inundaciones y la violencia estructural del sistema.

La primera generación de naxalitas comprendía jóvenes idealistas que renunciaron a todo para unirse al movimiento. ¿Esto sigue sucediendo?

Sí, muchos jóvenes que lucharon por una Telengana independiente se unieron a los maoístas. El más famoso fue Vivek, considerado un niño prodigio, que abandonó su curso de derecho y se adentró en los bosques. Fue asesinado en un encuentro en 2015 cuando tenía sólo 19 años. De hecho, este es el mayor temor del Estado. Los jefes de policía de cuatro estados decidieron recientemente trabajar conjuntamente para abordar el nuevo reclutamiento en el movimiento.

Su método de «boicot a las elecciones» ha fallado por completo. Las elecciones siguen siendo vistas como la mayor prueba de nuestra democracia.

La conciencia es lo que importa, no los números. Recientemente, el porcentaje de votación en Cachemira fue solo del 6%, y el ícono Irom Sharmila obtuvo solo 72 votos. Sin embargo, en Chhattisgarh, votan más personas y el BJP (Partido Popular Indio) sigue ganando. Pero incluso quienes votan no esperan a las elecciones para resolver sus problemas básicos. Pero debemos admitir que la gente todavía no está desilusionada con la democracia parlamentaria.

Pero a pesar de obtener el voto Adivasi y la inversión de dinero en zonas tribales y a pesar de las protecciones otorgadas a los Adivasis por la Constitución, el Estado no les está permitiendo una democracia real, es decir, el control sobre sus jal, jangal y zameen (Agua, Bosque y Tierra).

¿Fracasos?

Uno de los primeros fracasos fue ver a los Dalits sólo como trabajadores agrícolas, ignorando su casta incluso mientras luchaban en el terreno contra la intocabilidad. Un lapso grave es nuestra incapacidad para trabajar entre los musulmanes. Los musulmanes estaban entre los fundadores del Partido Comunista. Pero hoy, cuando la necesidad es tan grande, no están en ningún lugar del movimiento. Eso se debe a los espacios segregados en que vivimos y al dominio de los líderes religiosos que proyectan el Islam como la única solución contra el capitalismo y el comunismo. A veces me pregunto si algún día podremos hacer un gran avance en los guetos musulmanes de la misma forma que lo hicimos en las zonas Adivasi.

Fuente: https://mumbaimirror.indiatimes.com/mumbai/other/naxalite-movement-hasnt-killed-as-many-people-as-the-bourgeois-parties-have/articleshow/61110031.cms?